Voy a pensarme desde el inicio, desde la intención. Tengo otra realidad entre manos y su expresión requiere de mi consciencia.
-Claman por dentro nuestras obras para que las forjemos con herramientas propias-
Soy la mezcla de un montón de vientos. No permitiré que me digan qué otra cosa ser y empezaré a ser parte del tejido que nos entrelaza a todos.
Simbiosis y sociedad, entre partes y por las partes implicadas. Los pactos que he hecho no son justos porque incluso no los he aceptado conscientemente; es justo entonces que los rompa y además que cambie el rumbo.
Cuando escuche algo sera buscando su esencia y no buscando el lugar del dinero. Encontraremos el lugar para cada cosa.
Quisiera vivir en el mundo que construímos, no en el que nos venden y compramos resignados.
Consideremos ser hijos de un hilo inconsecuente y rompámoslo…
-y atrevernos a cantar nuestras canciones-
Seremos versos de montaña, de mar, de cultivos, de los azares del sol y la lluvia. Recordaremos los mitos ocultos de la laguna; perpetuaremos el agua fría y su flujo circulatorio desde el páramo hasta el mar.
Abramos la ventana para ver el paisaje, lo que coexiste. Habitemos el territorio y encontremos nuestra medida.
Quiero ser más yo. Quiero ser más nosotros.